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Aquí te explico por qué lo necesitas, aunque no lo sepas
Hay muchas cosas en la vida que suenan a sacrificio… y el voluntariado es una de esas que siempre tiene esa especie de halo de «dar sin recibir».
Pero espera, ¿y si te digo que además de hacer una buena acción, también puedes ganar un montón de competencias, contactos y experiencias que te harán brillar como profesional? No, no es broma.
El voluntariado como escuela de vida y de CV
Sabemos que, hoy en día, cada vez que alguien menciona «voluntariado», piensas en esas horas que podrías pasar descansando en casa con Netflix. Pero, ¿te has parado a pensar en la cantidad de habilidades que puedes adquirir a través del voluntariado? Habilidades que, por cierto, los reclutadores valoran muchísimo. Ya sabes, esas personas que revisan tu CV como si fuera el último episodio de su serie favorita.
El voluntariado te permite desarrollar competencias que difícilmente adquirirías en un entorno laboral típico. Desde la gestión de proyectos hasta la comunicación efectiva o la resolución de problemas. Todo esto mientras ayudas a los demás. Vamos, ¡win-win!
¿Experiencia profesional? Sí, gratis pero valiosa
Aquí viene el secreto que pocos te cuentan: el voluntariado cuenta como experiencia laboral. Sí, leíste bien. Las empresas valoran esas horas que has dedicado a un proyecto social, y lo mejor es que no importa si no era un «trabajo remunerado», porque lo que realmente valoran es lo que has aprendido y cómo lo aplicas.
Piensa en el voluntariado como un simulador del mundo laboral, pero con más empatía y menos presión por cumplir con deadlines imposibles. Además, te permite entrar en industrias en las que tal vez no habías trabajado antes. ¿Interesado en el mundo social, la cooperación o la educación? El voluntariado es tu billete de entrada.
El networking que no esperabas
Otra ventaja que a menudo se olvida es el networking. Cuando haces voluntariado, te rodeas de personas con intereses similares, profesionales con los que probablemente te cruces en el futuro. Y sí, el contacto que hoy es tu compañero de equipo en un proyecto voluntario, mañana podría ser la persona que te recomiende para ese puesto que tanto quieres. ¡Nunca subestimes el poder de una buena red de contactos!
Competencias blandas (las que las empresas buscan desesperadamente)
Las famosas soft skills que ahora todo el mundo menciona, y que antes pasaban desapercibidas, están más presentes que nunca en el voluntariado. Estamos hablando de empatía, liderazgo, trabajo en equipo, y muchas más. Estas habilidades blandas son las que las empresas buscan como si fueran tesoros escondidos en un CV. Y no hay mejor lugar para desarrollarlas que en un entorno voluntario, donde las personas y los recursos se gestionan con más creatividad y flexibilidad.
Un toque de humor: Voluntariado, también para los que piensan que «no tienen tiempo»
Sí, sabemos que lo has pensado. «No tengo tiempo para hacer voluntariado». Pero seamos sinceros, entre el scroll infinito en redes sociales y maratones de series, seguramente puedas encontrar unas horitas para una causa que no solo beneficiará a otros, sino también a ti. ¡Vamos, no es tan difícil!
¿Entonces, te animas?
Ya lo ves, el voluntariado no es solo para ayudar a los demás (que sí, es genial) sino que también es una inversión en ti mismo. Ganas competencias, contactos, y experiencias que puedes aplicar en cualquier entorno profesional. Además, le da a tu CV ese toque extra que puede marcar la diferencia en una entrevista.
¿Lo mejor de todo? En Revival Lo Rural hemos creado una nueva sección de voluntariado (🖤) en nuestras ofertas de empleo. Así que ya no tienes excusas, ¡echa un vistazo y empieza a sumar puntos en tu carrera profesional mientras ayudas a los demás!
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El próximo paso hacia tu futuro empieza con un pequeño acto de generosidad.
Nos vemos en la comunidad.